Cargando...

Cuidados de la piel en verano

Comienzan los tiempos de las vacaciones de verano en los que suele haber mayor exposición al sol y resulta importante tomar precauciones con respecto al cuidado de la piel, especialmente en bebés, niños y adolescentes.

Por ello, es necesario tener conocimiento sobre cuáles son los mejores métodos para cuidar a los más chicos y cuáles son los que debemos evitar.

María Gabriela Gandolfi, Jefa Interina de Consultorios Externos de Pediatría del Hospital de Clínicas de Buenos Aires, explica que “la radiación ultravioleta (UV) es una parte de la luz solar que llega a la superficie terrestre. La radiación UV tipo A es la que se relaciona con el fotoenvejecimiento (arrugas, manchas en la piel) y la UV tipo B es responsable del enrojecimiento, las quemaduras solares y el cáncer de piel. La existencia de la capa de ozono en la atmósfera es fundamental, ya que filtra gran porcentaje de la radiación UVB y en menor medida la UVA”.

En cuanto al daño que produce la radiación UV en la piel, advierte que es “acumulativo e irreversible” y que por eso resulta fundamental la fotoprotección en niños y adolescentes.

En este sentido, la profesional destaca que utilizar medidas de protección solar en el paciente pediátrico evitaría un gran porcentaje de problemas cutáneos en la adultez, entre los más importantes el cáncer de piel. “Debido a que los niños realizan múltiples actividades al aire libre, sin duda la medida más importante a tener en cuenta es evitar que estén expuestos al sol, pero si lo están no deben hacerlo entre las 11 y las 16 horas”, precisa Gandolfi.

A su vez, subraya que los lactantes menores de 6 meses nunca deben estar expuestos directamente a la luz solar, y si están al aire libre se los debe ubicar a la sombra y en un lugar fresco. Además, cuando los niños están al sol deben tener colocados una remera preferentemente de color oscuro, un gorro o sombrero de ala ancha para cubrir cara, orejas y gran parte del cuello y en lo posible anteojos de sol con filtro solar para proteger los ojos y zonas perioculares.

Los protectores solares deben usarse a partir de los 6 meses, aplicarse de manera uniforme y generosa antes de exponerse al sol (15 a 30 minutos) y cada 2 horas mientras dure la exposición solar, o antes si hubo inmersión en agua, sudoración excesiva o frotamiento de la piel con una toalla.

El FPS evidencia la eficacia de un protector solar en cuanto a grado de protección que ofrece. Existen compuestos con protección baja (FPS 2 a 15), media (FPS 15 a 30), alta (FPS 30 a 50) y muy alta (FPS > 50). En el paciente pediátrico los fotoprotectores deben tener un FPS alto, ser de amplio espectro para rayos UVA y UVB como también resistentes al agua.

La estrategia más importante para lograr una adecuada fotoprotección en los niños, es modificar las conductas relacionadas con la exposición al sol.

Radio y Televisión Santafesina Sociedad del Estado. Todos los derechos reservados de uso de marca ©.

Canal y Planta Transmisora: Ruta 11 | Km 482 | Recreo | Santa Fe +54 342 4815620. Oficinas Rosario: Constitución 1093 | +54 341 431 2215.

Visitá Nuestras Redes

Desarrollado por Onus Sistemas