“La salud mental empieza por estar a la altura de sus necesidades”
El bienestar mental de nuestros adolescentes, como dice Lucas Raspall, “empieza por estar a la altura de sus necesidades”. Empatizar, escuchar y estar presentes es un inicio de bienestar.
Por Valeria Elías
El Día Mundial del Bienestar Mental de los Adolescentes se celebra el 2 de marzo. Esta fecha busca sensibilizar y desestigmatizar los problemas de salud mental en los jóvenes. La salud mental es importante en esta etapa del desarrollo, en la que se forma la personalidad del individuo. Los adolescentes pueden enfrentar desafíos que impactan su bienestar mental, como la presión académica, las relaciones sociales, la autoimagen y la búsqueda de identidad.
Otro de los objetivos que persigue es desestigmatizar las enfermedades, los trastornos y patologías mentales. Para ello, la iniciativa fomenta e impulsa proyectos vinculados con la equidad racial, la inclusión, el acoso escolar y la salud mental general. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada siete personas jóvenes de 10 a 19 años padece algún trastorno mental, un tipo de trastorno que supone el 13% de la carga mundial de morbilidad en ese grupo de edad.
De acuerdo a diversos estudios, algunos de los trastornos de salud mental más comunes en la adolescencia (etapa clave del desarrollo humano) son los siguientes: ansiedad, alteración del estado de ánimo, déficit de atención y otros trastornos del comportamiento, trastornos de la alimentación (anorexia, bulimia), depresión o conductas de riesgo como es el caso de consumo de drogas. Asimismo, el suicidio es la cuarta causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años.
En esta fecha tan significativa, nada mejor que conocer cómo afectan los trastornos y patologías mentales a los más jóvenes para poder abordarlas con éxito. Es por eso la importancia de diseñar y aplicar estrategias de apoyo para los adolescentes, que beneficien su bienestar psicológico y que impacten de manera positiva en sus vidas, a través del aprendizaje socioemocional.
Lucas Raspall, médico psiquiatra y psicoterapeuta, de la ciudad de Rosario conversó con RTS sobre estas cuestiones. “No hay una definición de bienestar en la adolescencia, porque la definición es general y se apoya en aquella que ofreció la Organización Mundial de la Salud, haciendo referencia a esa integralidad que considera tanto lo físico como lo emocional, apuntado hacia un proyecto de vida con sentido en el cual la persona puede desplegar todo su potencial”, explica el especialista.
Luego agrega “la adolescencia en particular, es un tiempo de mucha inestabilidad, es lo propio de la adolescencia, eso no debería alertar, pero sí saber que se suelen ver como una montaña rusa, subidas y bajadas, que quizás no se observan tan así en otros periodos de la vida. Esto es clave para no patologizar los procesos propios de esta etapa”.
“El cuidado de la salud de un adolescente,- continúa exponiendo Raspall- como el cuidado de salud de cualquier otra persona, tiene un llamado a la acción, sobre todo a madres, padres, adultos de referencia, pero a la comunidad en general, a primero y ante todo, conocer y responder en tiempo y forma a las necesidades que tienen los adolescentes, que es algo que en general no está pasando. Como no se reconocen cuáles son sus necesidades, ahí empiezan a darse algunas fracturas en la salud que en este periodo de la vida se suelen manifestar mucho más en la dimensión de lo mental que de lo físico”.
“La salud mental se puede cuidar en esta etapa, si uno pudiera decir, bueno, qué es bueno, siempre un buen descanso, por supuesto una buena alimentación, la actividad física. Hoy hay que tener especial reparo en un uso responsable de dispositivos digitales. Está clara y es contundente la evidencia que muestra el daño que va generando un uso inadecuado y excesivo. A la par el acompañamiento, la contención por parte de familiares, por parte del grupo de pares, eso va a ser clave siempre” culmina el entrevistado.