El efecto que podría tener la suspensión de la vacunación contra la aftosa

Mientras el Gobierno avanza en la importación de las vacunas bivalentes contra la fiebre aftosa, el debate en torno a la inoculación o no del ganado se activó a partir del lobby de productores ganaderos que se resisten a seguir vacunando por los altos costos de la vacuna de los laboratorios argentinos.

La decisión de abrir las fronteras para que entren vacunas de Brasil, en parte, deja entrever la decisión de la administración de Milei de seguir fomentando que se avance en la vacunación y que no se permita la interrupción de la aplicación en los rodeos, tal como sugirió Federico Sturzenegger, estrecho colaborador del gabinete nacional.

Ahora bien, en tren de exponer la importancia de mantener los regímenes de vacunación, Raúl Milano, director Ejecutivo de Rosgan -mercado ganadero televisado que opera bajo el paraguas de la Bolsa de Comercio de Rosario- indicó en diálogo con RTS Medios que “el daño que se genera cuando uno por dejar de vacunar es muy importante, corriendo riesgo de quedar fuera de todos los mercados, una consecuencia mucho más grande que cualquier costo que insuma la vacunación contra la aftosa”.

“Que la vacunación se puede seguir manteniendo es importante y esto es un poco la realidad del momento que vivimos. La vacuna de aftosa que existe en la Argentina es una cuatrivalente, la que tiene Brasil es bivalente con lo cual no incluye todas las cepas y estamos comparando peras con manzanas”, mencionó el referente.

Milano pidió “sentar a las partes para llegar a un punto de coincidencia” respecto del precio de mercado de las vacunas locales. Vale aclarar que productores salieron a remarcar que el costo final de una vacuna por cabeza de ganado era de $2.200, aunque los laboratorios salieron a plantear que en realidad la venían cobrando al producto $550 por unidad.

“La alternativa de no realizar o dejar la vacunación en forma individual, es un paso atrás muy grande para todo el sistema”, insistió MIlano.

“Cuando uno tiene un brote de aftosa te cierran todos los mercados inmediatamente. Argentina está exportando casi más de 900.000 toneladas anuales, es una cifra realmente muy importante, recibir ese golpe sería terrible”, puntualizó.